HOMONIMIA Y POLISEMIA
La homonimia y la polisemia son situaciones en las que un conjunto de letras o de sonidos tiene varios significados:
- dos o varias palabras son homónimas si coinciden en su forma escrita u oral pero tienen diferentes orígenes;
- una palabra es polisémica si tiene varios significados pero un único origen.
Por tanto, la homonimia es una relación entre palabras mientras que la polisemia es una propiedad que puede tener una palabra concreta. En los diccionarios las palabras homónimas suelen tener articulos separados, mientras que la polisemia se indica con las diferentes acepciones dentro de cada artículo.
La homonimia tiene además dos modalidades: son homógrafas las que se escriben igual y homófonas las que se pronuncian igual. En español, las homógrafas son homófonas (pero no a la inversa, pues vaca y baca son homófonas pero no homógrafas).
La polisemia se puede producir por muchas y distintas causas
- Cambio de aplicación. A lo largo de la historia, la realidad a la que se refiere una palabra ha cambiado de forma, o ha pasado a aplicarse a un nuevo referente:
Por ejemplo, la palabra tecla, aplicada inicialmente a los instrumentos musicales, se ha aplicado después a las máquinas de escribir y finalmente a cualquier pieza móvil que puede pulsarse.
- Especialización en un medio social. En el lenguaje técnico de una profesión determinada, o en un estrato social en concreto, la palabra puede adquirir un significado especializado.
Por ejemplo, la masa a la que se refiere un panadero no es la masa a la que se refiere un albañil que habla con su peón, y ninguna de estas dos es la masa a la que se refiere el profesor que explica una clase de física a sus alumnos.
- Lenguaje figurado. Los hablantes nombran los objetos mediante términos metafórico (pata para nombrar la de la silla) o metonímico (copa para nombrar el vino).
- Homónimos reinterpretados. Dos palabras homónimas con significados parecidos, cuya etimología se ha perdido, pueden ser consideradas una sola palabra polisémica en la cabeza de los hablantes.
Justo Gil pone como ejemplo la palabra Reja, con dos etimologías distintas: una para la reja del arado, así como otra para la ventana enrejada.
- Influencia extranjera. Por calco semántico, una palabra en español puede adquirir significados que esa palabra tiene en una lengua extranjera.
Por ejemplo, por influencia del inglés, la palabra evento ha adquirido el significado de 'acontecimiento importante'.Una palabra polisémica es la que tiene varios significados. Un típico ejemplo en español es hoja, que se puede referir a una parte de una planta,o a la página de un libro.